Soy Amelia y me encuentro sola (creo) sola como una frambuesa roja y chiquita, por dentro, y bueno, también por fuera.
Mi vida creo q es como las piedras q le gusta tirar a esa otra amelié:
blop blop blop,
blop-blop-blop,
blp
No quiero ahogarme sola como las piedras, pesadas, antiguas y a veces filosas.
Buscó entre todos los idiotas en moto a ese HOMBRE, mi(s) HOMBRE(s), por qué no.
A veces también entro a las sex shops, igual y ahí, (como la canción) “en una tarde normal, mientras compraban algo espiritual” buscando “algo más”, lo encuentro a un Nino Quincampoix.
Mientras tanto, por aquí andaré, talvez perpetuamente…
1 comentario:
Buena canción. Pero siempre he creido que la canción no habla de una "sex shop" sino de una tienda de articulos supersticiosos, como velas, santitos y medallitas. A parte no se ese sea un buen lugar para encontrar al HOMBRE. Buen espacio.
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