Gracias a Ana hace varios días que no atino más que a pensar en el hombre ideal.
Largas reflexiones del día me han llevado a la conclusión de que este tipo en específico es más difícil de encontrar que la combinación perfecta para vestir cada día. Porque el hombre ideal de acuerdo con mis recientes cavilaciones es un hombre de edad madura al cual las mujer en su pasado han logrado convertir en tan codiciado especimen.
Ese tipo de hombre se encuentra más allá de los treinta (yo no objetaría la cercanía con los cincuenta) y tiene mayor conocimiento de sí mismo, seguramente accede con menos facilidad a sus caprichos, sonríe con mayor franqueza evitándo hacerlo por compromiso, por el simple placer que le causa observar nuestras caras de bobas ante el objeto del deseo.
Las canas son elemento indispensable, son como cantaba Gardel, las nieves del tiempo que es más sabio que cualquiera de nosotros en su día de mayor lucidez.
Entonces me pregunto ¿hay que formar parte de ese número indefinido de mujeres que pasan por la vida de un hombre para al fin conseguirlo en todo su esplendor? ¿al buen hombre hay que ganarlo o ya lo merecemos? ¿si me encuentro a este hombre ideal en sus cincuenta y yo en mis veinte no será que al pasar de algunos años me despierte al lado de un abuelo desconocido?
Son tantas dudas y yo soy tan pequeña para entender lo que me emociona de los hombres mayores.
3 comentarios:
creo que es algo que le podremos preguntar a enrique guzman cuando nos lo encontremos primis... jajajajja
O a la Tía Neuras no??? Que el tio Pecas saque unos amiguirris ra ra ra ;)
No entendí lo último jajaja, peeeeeerooooo....
Soltero maduro...... (si no se saben el resto, pregunten a sus madres, padres o amigos)
A esa edad, claro que no están disponibles. Encuentran a la mujer correcta o incorrecta. Problema cuando estan "available"
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