martes, abril 17, 2012

Vida prestada



¿Penélope Fortuna?, el misterioso hombre a la puerta preguntó. No tardé en afirmar cuando me entregaba un paquete y me hacía firmar la entrega. Él mismo cerró la puerta y me quedé con las manitas llenas de algo que no esperaba, algo que no era mío. Me senté a la mesa y lo abrí con cuidado. En el anterior encontré unos viejos acetatos y un diario con un nombre familiar pero a la vez de alguien que nunca antes había escuchado mencionar: Anónima Fortuna, mi tía Anónima. Leí e inmediato me enganchó, comencé a vivir una vida que no era mía, una vida prestada, una vida anónima. Pensaba en qué momento habría escuchado tal canción, o escrito esta página o robado aquel beso. Seguí leyendo, sigo leyendo. Creo su llegada me ha puesto a recordar, a vivir…vivir prestado.
…Quisiera vivir en otro tiempo, con otras personas, tener otros sueños que perseguir. Nada de esto me parece mío, me siento tan ligera como todos. Anhelo las épocas llenas de color, de besos, de ternura y de éxtasis…

1 comentario:

Lata dijo...

YYYYYYYYY?????