lunes, enero 08, 2007

El regreso del difunto viviente



Difunto: Viene del lat. Deffunctus, curiosa palabrita que a mi me suena como a “Defectuoso”. Pero ¿quién es el difunto en mi vida?


Pues nada más y nada menos que mi ultimo marido, el 5to para ser exactos. Y le llamo difunto, no porque este muerto en realidad, sino porque para mi fue mejor creerlo así una vez que firmamos el acta de divorcio.


Pero por qué lo cito, por qué lo recuerdo, por qué resucitó? No lo sé.


Desde hace tiempo, he venido sintiendo esa extraña sensación al despertar que me choca, porque no puedo comprender que demonios hace metido en mi sueño. Porque de pronto, la gente lo nombra, lo menciona, lo ve, lo frecuenta y por si fuera poco tengo que saber de su vida aunque no lo quiera…


Es extraño porque el había vivido alejado de mi mundo por un tiempo, tiempo de paz y tranquilidad para su servidora, pero hoy parece que regresa no a mi mundo, porque eso es imposible, pero si a mi tierra, a mis lugares, a mis momentos, a mi pasado, a mi presente y por desgracia a mi futuro…


Mientras tanto iré prendiendo unas cuantas velitas, compraré hartas hierbas medicinales y me tomaré mis chochitos recetados por reconocida bruja de Catemaco, no sea la de malas que, o se me trepe el muerto, o se me alborote la hormona y le reclame la pensión alimenticia…… y haga feo ¡!!


2 comentarios:

Ana F. dijo...

Tía, rézale a San Murphy y a la Santa Virgen María de la Consolación de los Afligidos.

No es que yo crea que vas a hacer feo, de ninguna manera, tu no sabes cómo perder el Glamour.

Wu* dijo...

Muy interesante, muy interesante.... hay muertos bien vivos y vivos bien muertos, suerte pues con el ente fantasmagórico y q sea lo q tenga q ser..
:)