Alguna vez escuche a alguien decirlo, pero no creía en lo más mínimo en la existencia de este fenómeno; pensaba que era una costumbre humana-femenina (tal vez), por hacerle saber al mundo (masculino) cuando ya se está en una "relationship". Pues bien, hoy por desgracia o fortuna (no sé), afirmo y reafirmo que este llamado "olfato masculino" sí existe.
Por fin, o tal vez, de nuevo (ja), he encontrado a un chico decente, de buena familia (y acomodada), que me saca a pasear, me compra mis palomitas, pero sobre todo, está loco loco por mí. No llevábamos ni una semana con esta nueva relación, cuando recibí después de meses de ausencia la llamada de aquel exnovio para "ver unas pelis" en su casa, invitación a la que me negué por lo espinoso del asunto y por mi nuevo estado "civil". (Nota: el chico a los 15 días volvió a marcar para saber si yo aún tenía novio. Citándolo: "...pues si te hace algo, o terminan y necesitas consuelo, llámame ¿no?... ¡QUe queeeeeeeeeeeee!!!!!) Por las mismas fechas, aquel artista que sólo me ilusionó se aparece para decirme que me extraña ¡WTF!. Por si fuera poco aquel amor pasado-aventurero-pasajero pretender retomar las andadas (¿Acaso repechaje??? Nooo túuuuuu cof cof).
Entonces ok, señoras y señores, lo acepto, he sido víctima de ese fenómeno ancestral que hasta nuestros días sigue rondando a las mujeres felices, plenas, aFORTUNAdas y en una "relationship". Fui víctima de ese olfato masculino, que al saber perdida a esa mujer amada, desamada o futura amada, trata de recuperar terreno, marcar territorio y evitar que ese dejo de luz en la vela encendida desaparezca. Me cuestiono si esto también pase a la inversa, nunca me he visto en esa situación, o no he sabido que alguna hermana, amiga, tía o vecina, que al saber a "ese hombre"(s) con otra, guste de compartir babas ¡Yaaaaiiccks!!!...que bueeeeno, ya lo dijeron los Garibaldis:
Porque será que a las mujeres les gusta tanto el hombre casado
¡Ay, no, no lo sé!
El hombre casado sabe más bueno, el hombre casado sabe mejor.
¡Ay, sí mamita!, Ay, sí mi amor!