viernes, marzo 14, 2008

Crónica de una muerte anunciada:

Querida familia,

Ya que me han dejado descobijada y casi huerfanita creo les comunico que creo q ha llegado a mi una enfermedad. Penelopita siempre lo supo, perspicaz toda ella desde casi mi nacimiento vio en mi, en una noche, el pecado. Penelopita no me regaño ni me lo comentó sino hasta años después, cuando yo, en una de esas noches de vasos vacíos y música ligera se lo confesé. La más cercana de esta enfermedad que me emborracha y me hace poco a poco ir perdiendo la razón a sido Penelopita. En ella últimamente encontré el socorro y consejos para actuar como nunca había yo actuado, creo que no le hice mucho caso, y por ello creo que pues estoy ahora más así como estoy. Después, lo discutí con la tía, le dije que él venía de una familia decente, pero como ya era medio conocido no me creyó. Mi prima Penelopita estaba presente mientras la tía me dio sus puntos de vista y recomendaciones: si te toca la mano, no se la dejes mucho tiempo; si te besa, bésalo pero tímidamente; prohibido preguntarle ¿qué somos?; y más aún prohibido invitarlo a pasar. Mi tía casi me deshereda después de decirle mis pecados, no quiso escuchar más pero luego sus sabios consejos me trataron de reubicar en la senda hecha para las no Fortuna pero sí, acepto, soy una Fortuna. Amelia Fortuna, prima de Penelopita, Charlotte y Ana, sobrina de la Tía Neuras y sobrina perdida del Tío Pecas.

Así es familia, he pecado. Creo que mi muerte se puede acercar, tengo miedo. El afortunado pues más que sabido creo que ya es.

Sólo les pido su bendición.

Las quiere y extraña,

Amelia.

4 comentarios:

Ana F. dijo...

NOooooooo!!!!!!!

Entendí bien??? Again??? Ameliaaaa noooooo!!!

Lo que sea, te quiero y tienes mi cariño y apoyo incondicionales...

Besos

Charlotte dijo...

mon dieu,
Chere amelie, je viens de conaitre la noveau,
Je t'aime et je suis heureux pour les deux.

besets

Penelopita dijo...

Changos, de compleja lectura y toque fatalista el post. Pues que le haremos prima, a afrontar con harta mil fortaleza esta grave enfermedad, pero oye ¿que no será epidemia?
Que Dios nos agarre confesadas :S

Amelia dijo...

pero re-bien confesadas!

hay que ir a ofrecer unas novenas, como una docena de ellas!